Aniversario de Poda en Bocachica

Ha pasado un año desde que fui enviada con un equipo a liderar el «Proyecto Libertad», un ministerio de misericordia creado hace 23 años con el fin de brindar el amor de Dios a traves de ayudar a suplir las necesidades basicas en salud a la población de Bocachica. Por años misioneros de muchas partes del mundo invirtieron su tiempo, esfuerzo y recursos para que hoy disfrutemos de: una casa, un lugar donde funcionó un comedor comunitario y una clinica (estos ultimos no estan en funcionamiento), durante varios años se ayudó a las familias a construir sus baños, se realizaron brigadas medicas, se brindó apoyo en orientación física, mental, espiritual y emocional.

Hemos recibido un legado, que al principio no entendía la magnitud pero poco a poco Dios nos va enseñando como vivirlo.
Vivimos en una casa que asemejo al jardín de el Edén, en donde Dios me ha hablado mucho; de la mayordomia personal, nuestro proposito de cuidar, gobernar, multiplicar lo bueno; me enfrenté a lo que por años habia aprendido y enseñado en los entrenamientos de la Universidad de las Naciones (UdN), y por la gracia de Dios hemos podido aprender y construir relaciones para seguir edificando el Reino de Dios allí, en la isla bonita a cerca a Cartagena, que a veces se siente olvidada, pero no para Él. Dios tiene planes de bien con esta comunidad y me ha involucrado en ellos.

Por donde quiera que veamos hay necesidades, hemos tratado de responder a algunas de la manera mas sabia posible, evitando causar daños a futuro. Hemos sido pacientes para escuchar de ellos mismos. Sus peticiones por ayudar a los niños y los jovenes con el uso del tiempo libre nos ha permitido crear programas como el club de lectura donde leemos la biblia, jornadas de aseo personal y ambiental, erradicaciÓn de la pobreza bÍblica, club deportes y valores, cocina y ayuda con las tareas del colegio Y próximamente un programa preuniversitario.
 
La pandemia nos permitió concentrar un poco mas nuestras fuerzas en mejorar la estructura de la casa donde pasamos la mayor parte del tiempo y donde recibiremos equipos de personas que vendrán a bendecir la comunidad.  En los ultimos meses hemos profundizado en las relaciones con la comunidad, hemos aprendido y crecido juntos, compartimos y trabajamos mas en equipo, tal como hemos aprendido que Dios lo hace.

Jucum, allí no solo representa una fundación, sino que somos lideres que influenciamos a traves del servicio a la comunidad, proporcionamos ayuda física, emocional y espiritual, somos amigos que queremos reflejar a Dios de manera práctica y enseñar a vivirlo en cada área de la sociedad. Soñamos con ser un campus de la UdN y proporcionar educación con cosmovisión bíblica a todos aquellos que procuran una transformación.

Seguiremos escribiendo la historia, soñando y trabajando junto con Dios y nuestros amigos de Bocachica, para ver una comunidad que conozca y comprenda sus palabras,  practique el amor y supere las adversidades que han conocido. Creo que lo mejor viene cada día, y que cuando escuchamos a Dios, le obedecemos y permanecemos en Él, podemos dar y ser un fruto de buena calidad, para glorificarlo a Él y bendecir a muchos.

Gracias a Daniel y Natalia, Markus, Jorge, Karen, Erika, German, Daniela S, Sofia, Nicole, Manuel, Fiene, Jeison, Brandon, Alejandra, Sebastian, Karol, Yesica, Geraldo, Silvia, Clara, Glemy, Duris, Marlaine, Toño, Sr. Salustiano, Samy, Marley, Juan David, Daniela, Arka, Activate por tu salud, iglesias, pastores, y muchisimos mas que el espacio no me alcanzaría para agradecerles por su inversión directa o indirecta en este lugar. Pero aún estoy mucho mas agradecida con Dios por su compañia, llamado, cuidado, gracia y fidelidad durante este primer año.

Separados de Él nada podemos hacer.

Con mucho cariño,

Yulieth Herrera
Staff Juventud Con Una Misiòn Cartagena – Bocachica

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